martes, 6 de abril de 2010



Entro en una habitación amarilla, con paredes amarillas, luz amarilla y cortinas amarillas, en done hasta el aire es amarillo. Me recuerda al desierto. Se convierte en desierto. decido entonces recordarte pero la habitación no se convierte en ti. Cierro la puerta. Pero vuelvo a entrar en la habitación con paredes, luz, cortinas y aire amarillo. tormenta de arena para mi corazón. la arena se me mete en los ojos y lloro. me convierto en glaciar y ni con esto desaparece el desierto... y ni con esto desaparezco yo.Cierro definitavamente la puerta. pero tengo la sensacion de haberme dejado algo dentro. Años después sabré lo que es. Años después sabré que me he dejado dentro al tigre. Años después me acordare de cuando era tigre...